Madrid ya tiene la alternativa de movilidad para las obras de la A-5

El Plan de Movilidad tiene como objetivo "minimizar al máximo el impacto de las obras sobre el tráfico en esta área de la capital y en el resto de la ciudad". Las intervenciones afectarán principalmente al tramo comprendido entre la avenida de Portugal y los alrededores de la avenida del Padre Piquer. El Ayuntamiento de Madrid, promotor principal de las obras, ha desarrollado esta estrategia en colaboración con la Comunidad de Madrid, responsable del Consorcio Regional de Transportes y de Metro.

El Consistorio señaló que, "dada la complejidad técnica y de gestión de esta intervención", el Plan de Movilidad se ajustará progresivamente a cada fase de las obras. A medida que los trabajos avancen, "se ocuparán uno o varios carriles de la A-5 según las necesidades", lo que implicará una disminución en la capacidad de la vía. Sin embargo, "en los momentos de mayor impacto sobre la movilidad, se mantendrán dos carriles por sentido", y las afectaciones más significativas al tráfico no comenzarán hasta diciembre.

Refuerzo Metro y Bus 

En primer lugar, se reforzará el servicio de transporte público con un aumento del 7,3% en la frecuencia de las líneas de la EMT que cruzan la zona de obras, como la 36, 39 y 65. Además, se intensificará el servicio en las líneas que sirven como alternativa al eje de la A-5, específicamente la 17, 34 y 138. También se incrementará la frecuencia de la línea de  metro ligero ML3 , que conecta con Boadilla del Monte, y se mejorará el servicio de las líneas 5 y 10 de Metro hasta en un 9%. Por otra parte, el Ayuntamiento ha solicitado un refuerzo de la línea C-5 de Cercanías, aunque aún no está confirmado si se implementará.

El plan también contempla itinerarios alternativos dentro y fuera de la zona afectada por las obras. Para acceder a Madrid, se sugiere utilizar la A-5R, que conecta con la M-40 y facilita el acceso a la M-30. Para salir de la ciudad, se recomienda tomar la A-42 o la Vía Lusitana para llegar a la M-40, o bien circular por General Ricardos hasta la Avenida de los Poblados.

Área de Obras 

Para la movilidad dentro del área de obras, se establecerán como vías alternativas la calle Sepúlveda, la calle del Concejal Francisco José Jiménez Martín y la calle de Caramuel, que conecta con el Paseo de Extremadura y permite acceder a la M-30. En estas calles se llevarán a cabo ajustes en los semáforos para adaptarse a cada fase de la obra y facilitar el uso del viario alternativo.

Además, se implementará un refuerzo en la señalización en las vías de alta capacidad cercanas a la A-5, especialmente en puntos clave para los conductores. Esta señalización adicional se colocará en múltiples lugares de la M-40, la R-5 y otras carreteras como la M-501, M-503 y M-511. También habrá señalización en el interior de la almendra central, en vías como el Paseo de Santa María de la Cabeza, que contará con un panel de señalización variable antes del túnel, así como en puntos estratégicos como la glorieta de Pirámides y la calle de Toledo. Por último, las advertencias se incluirán en las principales vías de la zona sur, como la avenida de los Poblados, y en los túneles de la M-30 para informar con suficiente antelación antes de llegar a la A-4 y la A-42.

Caso de Emergencias 

Antes de cada fase de las obras, los servicios de movilidad realizarán una monitorización de aforos que proporcionará una imagen real del flujo de tráfico en la zona de intervención. Este análisis, obtenido a través de un modelo de micro simulación, tiene como objetivo "implementar las mejores soluciones en cada momento y hacer ajustes y optimizaciones a los desvíos establecidos".

Por último, el Ayuntamiento de Madrid implementará un plan de contingencia para prevenir y gestionar situaciones no planificadas, aunque previsibles. El propósito es "manejar las emergencias de manera eficaz". Este plan incluye un procedimiento formal y documentado que especifica las acciones a seguir para abordar con éxito cualquier accidente, incidente o emergencia, minimizando el impacto en el funcionamiento del entorno. Durante el proceso, el Consistorio activará "recursos materiales suficientes para regular posibles desvíos o incidentes" y fortalecerá la comunicación con los operadores y gestores de las distintas redes de transporte, Calle 30, la Policía Municipal y el Centro de Gestión de la Movilidad del Ayuntamiento.