Crónicas de nuestro tiempo

La democracia al banquillo

La democracia, se ha convertido en un sistema político, donde los gobiernos de izquierda bolivariana actúan como dictadores de intensidad media, en la línea equidistante entre la patente ilegalidad y la irregularidad manifiesta.

Hay dictaduras encubiertas denominadas democracias con miles de políticos sangrando las arcas del Estado, sin haber trabajado durante toda su vida en otra cosa que no sea estar cerca de chanchullos, favoritismo y corrupción.

Este tipo de seudo democracias dictatoriales, suelen estar muy  participadas por ex terroristas y delincuentes, para marcar la política del gobierno en las reformas de la judicatura, la economía y la Constitución por la puerta de atrás, tal y como sucede en España con los criminales de ETA por medio de Bildu en el gobierno sanchista, o, en gobiernos como los de Nicaragua; Colombia; Venezuela, Cuba y Bolivia; (.!.) además de países cómo México y Brasil, cuyos presidentes fraguando su propia tiranía, preparan a sus incautos votantes para implantar reformas que consoliden un régimen de perfil comunista/bolivariano.

Todos nos preguntamos ¿Cómo se ha podido llegar a esto? La respuesta es fácil: Salvo el caso de Cuba y Venezuela, que fueron mediante un golpe de estado, el resto lo han ido tejiendo mediante el apoyo de terroristas infiltrados en la política con la intención de apoyar el narcisismo del líder, para convertir el hemiciclo de la soberanía nacional en un circo dirigido por quienes se presentan como la voz del pueblo.

Exactamente igual que sucede con los 178 diputados que avalan las tropelías de nuestro autarca, a cambio de dádivas, concesiones y promesas, aunque en ello vaya la destrucción de España.

La seudo democracia, se ha quedado obsoleta y por ello, convertida en una maquinaria preparada para generar cada vez más gastos y por ello más impuestos. Nuestra seudo democracia, ha traído a la administración, cientos de miles de indolentes en el pesebre de los corruptos; y a las grandes empresas multinacionales operadas indirectamente por el poder del estado, un buen número de holgazanes, a la sombra del abuso de las puertas giratorias.

La seudo democracia, ha permitido que delincuentes y terroristas hayan quedado en libertad. Que políticos corruptos del partido que gobierna hayan sido exonerados o indultados sin que el líder de la oposición haya puesto el grito en el cielo, posiblemente pensando en él mismo.

La seudo democracia de perfil comunista/bolivariano, es lo más parecido a una dictadura que en nombre de la libertad abusa de los ciudadanos sometiéndoles a una carga impositiva basada en el engaño. Con estas seudo democracias obsoletas, podemos pagar por lo mismo doble impuesto, y perder incluso las herencias por el gravamen desmedido que la maquinaria del fallido Estado necesita para mantenerse en el poder de los dictadores.

España vivió la dictadura de un general que resultó muy barata y productiva durante 38 años, y ahora vivimos una democracia dictatorial desde hace 6 años, organizada en complicidad por 178 individuos de mala reputación, que en el Congreso manipulan las leyes; cometen delitos punibles; delitos inmorales y delitos en vías de investigación, mientras se reparten lo que pueden y no pueden, al precio de mantener en el marchito a 350.000 políticos de todos los colores y sobre todo.., al capo de la banda.

La mujer del presidente está investigada; el hermano del presidente está investigado; el fiscal general del Estado en proceso de encausado; cientos de millones de euros malversados; el presidente del Tribunal Constitucional prevaricando con los indultos y la amnistía; el presidente de PSC, Salvador Illa, acusado públicamente de malversación por las mascarillas y material sanitario; la presidenta del Congreso acusada públicamente de malversación; Margarita Robles, sumisa a los desafueros y pendiente de su nómina; Marlaska, el peor ministro de Interior desde 1.936.., y así, desde la democracia de un Felipe González que en 1.983 se erigió en autor material de la expropiación  del Holding Ruiz Mateos para repartirlo entre sus amigos los Cisneros y otros.., digamos que nuestra seudo democracia siempre ha estado a caballo entre los terroristas y la corrupción más grande de los últimos 85 años.

Para colmo y desvergüenza, ahora resulta que son los ex terroristas quienes apiadándose de los que recibieron un pelotazo de goma por los anti disturbios callejeros, han impuesto al gobierno que se reforme la ley de seguridad ciudadana al antojo de ellos, sin una sola mención por parte de la oposición.., no a las pelotas de goma de la policía, sino a las bombas de goma 2 que estos mismos criminales colocaban para asesinar policías, guardias civiles, políticos e inocentes ciudadanos.