El Flexicar Fuenlabrada está preparado para afrontar uno de los momentos más trascendentes de su historia reciente. Este sábado a las 20:00 horas, el conjunto madrileño se medirá al Súper Agropal Palencia en las semifinales de la Final Four de ascenso a la ACB, un duelo a cara o cruz que puede abrir las puertas de la élite del baloncesto español. El encuentro se disputará en un escenario de altura, la Caja Mágica de Madrid, ante cerca de 2.000 aficionados fuenlabreños que teñirán de rojo las gradas en una cita inolvidable.
El equipo llega en un gran momento físico y anímico tras superar con autoridad al Tizona en cuartos de final, por un contundente 3-0. Las dos semanas de preparación han permitido al cuerpo técnico y a los jugadores recuperar efectivos, trabajar detalles tácticos y reforzar el compromiso colectivo. Toni Ten, técnico del Flexicar Fuenlabrada, lo tiene claro: “Será un gran partido entre dos equipos que defienden muy bien y que llegan en su mejor momento del año. Vamos a por todas”.
Estabilidad, cohesión y sacrificio han sido las señas de identidad del Fuenlabrada durante toda la temporada. Con pocos cambios en la plantilla, el equipo ha demostrado una sólida identidad en ambos lados de la pista. Así lo destaca uno de sus capitanes, Jorge Bilbao: “Hemos sabido adaptarnos a todas las situaciones del año. Nos puede dar una ventaja haberlo vivido todo ya. Iremos todos a una, ganemos o perdamos”.
Enfrente tendrán a un rival de nivel, el Súper Agropal Palencia, que llega a esta Final Four tras eliminar con solvencia al Obradoiro. Se trata de un equipo profundo, físico y con talento en todas las posiciones, bien dirigido desde el banquillo. Para Paul Jorgensen, el base estadounidense del conjunto fuenlabreño, la clave está en imponer el ritmo: “Tenemos que jugar con nuestro estilo, ser físicos, dominar el ritmo. Hemos llegado hasta aquí haciendo bien las cosas y no vamos a cambiar ahora”.
La experiencia también juega su papel. Aunque para muchos será la primera Final Four, la plantilla acumula kilómetros en partidos de alta exigencia. La intensidad emocional del playoff ha servido como preparación para una semifinal en la que, como afirma Jorgensen, “hay más presión, pero hay que afrontarla como un partido más”.
El propio Toni Ten ha subrayado la fortaleza del grupo, no solo por su calidad, sino por su implicación diaria: “Es un grupo que entrena bien, se lleva bien, propone cosas… y eso es parte de que estemos aquí con 30 victorias. Me da pena que queden tan pocos días de temporada porque lo estamos disfrutando mucho”.
El ambiente en la Caja Mágica será uno de los grandes alicientes. Cuatro aficiones, cuatro proyectos ambiciosos, un único ascenso en juego. El técnico fuenlabreño asegura que el equipo disfrutará del calor de la grada: “Siempre te da tiempo a vivirlo. Ver a nuestros aficionados animar es un plus. Vamos a ser de los más ruidosos seguro”.
Flexicar Fuenlabrada quiere seguir soñando, y lo hará con su gente, con un baloncesto directo y sin artificios, con la convicción de quien ha trabajado toda la temporada por llegar a este punto. Una cita histórica espera al equipo del sur de Madrid, que no quiere dejar pasar la oportunidad de volver a la ACB.