Urbanismo

Arrancan las obras del soterramiento de la A-5

La obra cubrirá 3,2 kilómetros de la A-5 desde Padre Piquer hasta la avenida de Portugal 
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photo_camera Modelo 3D del futuro Paseo Verde de la A-5 | Foto de Ayuntamiento de Madrid

Ha comenzado este viernes las obras para el soterramiento de la carretera de Extremadura (A-5) a su paso por el distrito de Latina. Este ambicioso proyecto, que tendrá una duración de dos años, transformará la actual carretera, que se encuentra muy cerca de las viviendas, en el nuevo Paseo Verde del Suroeste, siguiendo el modelo de Madrid Río.

Durante los primeros días, los vecinos solo notarán algunos preparativos, como la llegada de maquinaria, la instalación de casetas y la pintura amarilla en las vías, pero no se esperan cortes de tráfico hasta diciembre. El dispositivo de movilidad, sin embargo, ya está en marcha, con un aumento en los servicios de Metro y autobús. Antes del inicio de las obras, el Ayuntamiento ha revisado las estructuras y edificios cercanos para evitar cualquier daño durante el proceso.

El soterramiento abarcará 3,2 kilómetros de la A-5, desde la avenida de Padre Piquer hasta la avenida de Portugal, y permitirá reducir en un 90% el tráfico diario en esa zona, que actualmente soporta unos 80.000 vehículos. Además, se espera una significativa disminución de los gases contaminantes, mejorando la calidad de vida de los vecinos.

Paseo verde 

El futuro Paseo Verde del Suroeste, que sustituirá la carretera de Extremadura (A-5) tras su soterramiento, tendrá una superficie de aproximadamente 80.000 metros cuadrados. Este espacio se transformará en una amplia zona verde con 7.300 nuevos árboles, donde los recorridos peatonales y carriles bici tendrán un protagonismo especial. El tráfico en superficie se reducirá a recorridos locales para vehículos privados y transporte público urbano, favoreciendo la movilidad sostenible.

El paseo contará con siete áreas de conexión a lo largo de su trazado, que estarán demarcadas por plazas, pérgolas, espacios públicos y parques, pensados para fomentar la actividad lúdica en el barrio y ofrecer zonas de recreo a los vecinos.

Bajo tierra, el proyecto contempla la construcción de un túnel con tres carriles por sentido. Los carriles más cercanos a la mediana estarán reservados para buses y vehículos de alta ocupación (bus-VAO), con una señalización regulable que se ajustará al tráfico para maximizar su eficiencia. En lugar de utilizar tuneladoras, se empleará un sistema de pantallas que facilitará la excavación. Además, se instalarán sondas geotérmicas, lo que permitirá aprovechar la energía subterránea para suministrar energía a edificios públicos cercanos una vez concluidas las obras.

Movilidad y R-5 

Durante las obras de soterramiento de la A-5, el Ayuntamiento de Madrid reforzará el transporte público y desviará el tráfico con un plan de movilidad que, aunque criticado por PSOE y Más Madrid por convertir la zona en una "ratonera" y aumentar el tráfico, se pondrá en marcha para minimizar las molestias a los vecinos. El refuerzo incluye un incremento del 7,3% en las líneas de autobuses de la Empresa Municipal de Transportes (EMT), equivalente a un autobús adicional por línea, y un aumento del 9% en el servicio de las líneas 10 y 5 de Metro. Además, el plan será monitoreado constantemente para hacer ajustes según avance la obra.

Aún queda pendiente el refuerzo de la línea C5 de Cercanías, solicitado por el Consorcio Regional de Transportes, así como la posible gratuidad de la carretera de peaje R-5. Estos temas se discutirán en una reunión entre el alcalde José Luis Martínez-Almeida y el ministro de Transportes, Óscar Puente. El Ayuntamiento se ha mostrado en contra de asumir el costo de la gratuidad de la R-5, calificándolo de "broma de mal gusto", ya que solo 1,5 kilómetros de la vía se encuentran dentro del término municipal de Madrid.

Durante las obras, se mantendrán dos carriles operativos por cada sentido en la A-5. Inicialmente, estos carriles se situarán a un lado de la carretera mientras se trabaja en el otro, y posteriormente se trasladarán al lado opuesto. De esta manera, el tráfico de la A-5 seguirá funcionando mientras se construye el Paseo Verde del Suroeste y su parte subterránea.

Operación Campamento 

La segunda parte de este gran proyecto llegará en la próxima legislatura con la Operación Campamento que se desbloqueó en el último Pleno Municipal y que se pondrá en marcha en colaboración con el Ministerio de Vivienda. En el marco de este plan se soterrará el segundo tramo de la A-5 hasta avenida de la aviación y se construirán 10.700 viviendas de las que al menos el 60% serán de protección oficial y el 7% de alquiler. El Ministerio aportará hasta 146 millones de euros para el soterramiento y 3 millones de euros al Ayuntamiento para redactar el proyecto.

Esta decisión ha motivado protestas vecinales en los últimos meses, que el domingo pasado se materializaron en una marcha por el paseo de Extremadura para reclamar que esa segunda fase del soterramiento se haga también en esa legislatura.

Los vecinos denunciaron que el Ayuntamiento prometió en su plan inicial soterrar también 700 metros hasta pasada la avenida de los Poblados y reprocharon que tendrán que seguir "soportando durante muchos años aún el ruido y los humos" de los coches. No obstante, el Consistorio ha manifestado en numerosas ocasiones que mantiene el plan de ejecutar este soterramiento en la próxima legislatura con la Operación Campamento.