Crónicas de nuestro tiempo

Ya es demasiado tarde

El narco dictador Maduro que dirige con mano criminal el régimen bolivariano que atenaza a la población venezolana, no sólo es defendido y avalado en connivencia por el régimen sociocomunista del gobierno español, encabezado por el cero demócrata José Luis Rodriguez Zapatero, ahora protegido por la guardia civil en la urbanización Famara en la isla de Lanzarote; y su séquito Iglesias, Monteros², Monedero, Garzón², Errejon y todos los ministros apesebrados incluidas especialmente  Margarita Robles, Marlaska, Pilar Alegría, Albares, y en general toda la banda sanchista que secunda nuestra invasión; sino que algunos gobernantes pertenecientes al Grupo de Puebla, especialmente el cubano, han hecho piña para mantener en el poder a Maduro, como bastión de toda esa indecente patulea dirigente de tiranos comunistas, baluarte del régimen bolivariano que defiende nuestro gobierno. Y no contentos con ello, el Grupo Mercenario Wagner, en nombre de Putin, ha mandado tropas paramilitares a Venezuela para defender el régimen narco de Maduro cuyo balance de muertos y desaparecidos se estima por encima de 100 inocentes y alrededor de 1.600 detenidos.

El grupo de mercenarios Wagner, se fundó en Rusia como primera fuerza de choque para intervenir en países como: Siria; Sudán; Ucrania; Guerra del Donbás; Anexión de Crimea; República Centroafricana; Libia; Mozambique; Malí y ahora también se negocia su intervención en Venezuela, cuya oferta ha de ser un pago mensual de alrededor de 5.000 dólares americanos por soldado y mes, sin contar los bonus que se añadirán cuando se consigan ciertos logros previamente negociados

El Grupo Wagner, cuyo jefe, Yevgueni Prigozhin, se dice que falleció en extrañas circunstancias en agosto pasado, al tiempo que se asegura haberle visto en la Isla Margarita de Venezuela  -posiblemente enriquecido y retirado o a las órdenes de Maduro -  ha reanudado el reclutamiento de mercenarios en los Urales y Siberia para que combatan en las filas del Ejército ruso.

Fundado en 2018, está controlado por el Ministerio de Defensa ruso y formado por docenas de miles de exmiembros de las fuerzas especiales rusas Spetsnaz, que ganan un sueldo muy alto para la media rusa, así cómo exconvictos criminales cuya única alternativa de libertad habría sido alistarse al Grupo Wagner

Cuando intervienen en el país contratado o asignado por Putin, la misión de entrada es sembrar el caos, deteniendo y asesinando sin miramiento; violando, robando y aterrorizando a la población como primera fase de disuasión. Después, en un segundo envite, la crueldad sangrienta de sus actuaciones suele ser de tan feroz impiedad que las personas se esconden en sus casas obligadas a no salir en reivindicación, manifestación o agrupamiento.

Salvo una intervención inminente y rápida del ejército de élite americano, el pueblo Venezolano no volverá a conocer la libertad, tal y como pasó en Cuba y terminará pasando en Honduras, Nicaragua, Bolivia, Colombia, Perú, Chile y Méjico; aparte de otros Continentes donde la izquierda radical bajo la experiencia venezolana, guiada por nuestros podemitas con Joker y Garzón a la cabeza, ha descubierto el asalto y cohecho a las Instituciones, medios de comunicación y tribunales para impedir la alternancia democrática de elecciones libres, donde el sanchismo bate con dilema la disyuntiva, entre la honestidad de las reglas del juego democrático para acabar en los tribunales; o, continuar la escalada autócrata amparada en una Confederación de repúblicas de la que ya no nos salva ni una moción de censura de amplia mayoría.

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