Vivienda

La Comunidad entrega en Getafe las llaves de 78 viviendas del Plan Vive

Las rentas de las viviendas destinadas al alquiler a precio asequible oscilarán entre los 465 y los 815 euros mensuales
Jorge Rodrigo, consejero de Vivienda, en la entrega de llaves - Comunidad de Madrid
photo_camera Jorge Rodrigo, consejero de Vivienda, en la entrega de llaves - Comunidad de Madrid

La promoción de viviendas está ubicada en la calle Juana Gutiérrez de Getafe donde el Gobierno regional está construyendo 864 casas, 414 concluirán las obras a finales de año.  

El consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras, Jorge Rodrigo, ha recordado tras el acto que se trata de pisos de uno, dos y tres dormitorios por los que sus inquilinos pagarán hasta un 40% menos que el valor de mercado para inmuebles de iguales características: obra nueva, en urbanización cerrada con piscina, zonas verdes, trastero y plaza de garaje.  

En concreto, las rentas oscilarán entre los 465 y los 815 euros mensuales, “una  relación calidad-precio que ha quedado probada en la amplia demanda que han tenido, con más de 9.000 solicitudes registradas”, ha dicho Rodrigo. Además, estos hogares están construidos siguiendo la técnica de edificación industrializada y cuentan con los últimos avances en materia de eficiencia energética.  

Plan Vive

El Plan Vive es una iniciativa del Gobierno regional de colaboración público privada diseñada para incrementar la oferta de alquiler con 10.500 nuevas viviendas de estas características en esta legislatura. Con la de hoy, ya se han  entregado más de 560 y pronto finalizará la construcción de otras 4.000 antes de final de año. De esta forma, la Comunidad de Madrid ha construido el 50% de todos los pisos asequibles terminados en España y más del 60% de ese mismo tipo en régimen de arrendamiento. 

Requisitos

El principal requisito para optar a estas casas es que la persona solicitante la dedique a residencia habitual y no tenga ninguna otra propiedad a su nombre en todo el territorio nacional. Igualmente, tienen prioridad los empadronados en el municipio donde estén ubicados o los que tengan su puesto de trabajo en la  localidad desde hace al menos tres años. Otro aspecto importante es el límite de gasto, ya que no se puede destinar más del 35% de los ingresos netos anuales de la unidad de convivencia al pago de la renta total por año.