El alcalde de Leganés, Miguel Ángel Recuenco (PP), ha anunciado este miércoles que someterá el presupuesto municipal a una cuestión de confianza, una medida inédita en la historia del municipio. La decisión llega tras el bloqueo de la oposición, que ha rechazado en dos ocasiones las cuentas presentadas por el gobierno de coalición entre el PP y Unión por Leganés (ULEG).
Un presupuesto clave para el municipio
Recuenco ha defendido que el nuevo presupuesto, de 212 millones de euros, es esencial para el desarrollo de Leganés. “Estoy convencido de que, con este presupuesto, vamos a mejorar y prosperar”, ha señalado el regidor. Entre los proyectos que dependen de su aprobación, destacan:
- Incremento salarial de los trabajadores de limpieza viaria.
- Mantenimiento del centro de atención a mujeres víctimas de violencia de género.
- Incorporación de 25 nuevos agentes a la Policía Local.
- Ejecución de inversiones por valor de 40 millones de euros.
El alcalde ha recordado que en diciembre la Junta de Gobierno local aprobó el presupuesto y que, antes de llevarlo a Pleno, solicitó a los grupos de la oposición que presentaran propuestas para facilitar su abstención. Sin embargo, tras dos meses de negociaciones, los presupuestos han sido rechazados.
El escenario tras la cuestión de confianza
La cuestión de confianza se votará en un Pleno extraordinario el próximo lunes a las 11:30 horas. Si el presupuesto vuelve a ser rechazado, la oposición tendrá un mes para presentar una moción de censura que desaloje al PP y ULEG del gobierno municipal.
Sin embargo, Recuenco cuenta con la ventaja de que el PSOE ha descartado formar gobierno con Vox, lo que dificulta la posibilidad de una alternativa viable. Aunque el portavoz socialista en Leganés, Javier Márquez, inició contactos para negociar un veto, el comité local del PSOE y el secretario general del PSOE-M, el ministro Óscar López, desautorizaron esta opción.
Si en el plazo de un mes la oposición no presenta una moción de censura, el presupuesto quedará automáticamente aprobado.
