Esto era que se era un convento en el que unas pías Clarisas hacían deliciosos dulces y consagraban su vida a Dios desde su voto de obediencia y su voto de pobreza y su amor al prójimo y su etc. etc. super eclesiásticos y piadosos.
Pero resulta que no, resulta que Belorado, lugar donde se emplaza su convento, era en realidad su “Dorado” la ciudad legendaria de oro, al que aspiraban frenéticas hasta la excomunión, desde su descarriado corazón, disfrazadas de hábitos y cargadas de estampas y medallas de santos, y cánticos y oraciones y tocas sobre sus cabezas algo perjudicadas quizás por el mismo demonio,
Porque a tocas y a locas las monjas compraban posesas, sábanas de seda y mantas de terciopelo, jamones ibéricos y teléfonos iPhones y tenían contratados a nueve trabajadores (siendo ellas once), casi casi un operario por monja, pero sin soltar un euro, o sea, sin pagar sus nóminas ni factura alguna.
Cabe decir con mucha propiedad que “las apariencias engañan” que las ejemplares “religiosas” son más bien ejemplares tramposas a quienes lo único que les falta es montar timbas de póker y desplazarse a Estoril, que tiene un casino estupendo y se encuentra en Portugal, lugar buenísimo para evadir impuestos españoles, y si no, que se lo pregunten a David Sánchez, investigado por un presunto delito de malversación y tráfico de influencias.
Parece mentira que un tío tan feo sea el hermano de un señor tan guapo que hasta ciega al sol con su resplandor poderoso y omnímodo. ¿Lo sabían ellos desde pequeños? ¿Era al pobre niño feo, David, a quien hacían los mimos y carantoñas en casa para que no se acomplejara con su hermano Pedro Goliat? ¿De ahí le viene a este último el afán de destacar?, ¿de situarse en el centro de todo, todo y todo, y formar ministerialmente un sumiso séquito para sentirse tal vez un Alejandro Magno cualquiera pero con vocación de “barrendero” del lodo a su “amada Begoña” y a su amada España y a su amado hermano y sobre todo si mismo?
Todos amados porque él se consume de amor propio.
Ábalos también anda o ha andado por el mundo acompañado en viajes oficiales por una misteriosa y probablemente cariñosa mujer desconocida en los temas oficiales.
Y ¿Quién es ella?, pues una tal Jessica, y los billetes -costeados al parecer por el gobierno- fueron gestionados por el fiel Kuasimodo, perdón, por Koldo (ese ser al que apenas nadie parece conocer de momento), pero que curiosamente se encargaba de los asuntos de casi todos y de los de faldas del entonces ministríssimo (noches de hotel para otra tal Andrea etc.).
Es que el dinero público no es de nadie, bueno, perdón de nuevo, es del gobierno y santa Rita, Rita, Rita, si son amigos de Begoña se les da quizás una “propinita”
Y siempre nos quedará Santo Domingo, de hecho, los 'Falcones' del Gobierno volaron a República Dominicana 27 veces en dos años sin que conozcamos ni el motivo ni la razón.
Buscarían presuntamente, también ellos El Dorado.
Va a resultar que al final todos son como las monjas cuando las monjas excomulgadas viven como ministros. Y que los ideales y las creencias y los puntos de mira y las aspiraciones y en definitiva el total, depende de como diría Quevedo “poderoso caballero es Don dinero:
Es galán y es como un oro, tiene quebrado el color, persona de gran valor, tan cristiano como moro. Pues que da y quita el decoro y quebranta cualquier fuero, poderoso caballero es don Dinero”.
Y a quienes no lo tienen, que les den sopas con honda (proyectil), porque de la cuchara a la boca se pierde la sopa.
La sopa y la Verdad, y la Vergüenza también se han perdido, o mejor dicho, también han sido desgraciadamente excomulgadas.
