Sanidad

Matute denuncia la falta de financiación y de profesionales para aplicar el nuevo Plan Nacional de Salud Mental

La consejera Fátima Matute critica que el Gobierno central transfiera obligaciones a las comunidades sin dotación presupuestaria suficiente ni recursos humanos.

Fatima Matute durante sus declaraciones
photo_camera Fatima Matute durante sus declaraciones

La Comunidad de Madrid ha mostrado su apoyo condicionado al nuevo Plan Nacional de Salud Mental aprobado en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, pero ha lanzado un serio aviso: “sin profesionales ni financiación adecuada, se corre el riesgo de generar falsas expectativas a la ciudadanía”.

Así lo ha advertido la consejera de Sanidad madrileña, Fátima Matute, que ha reclamado un enfoque realista y sostenible para aplicar este plan, que considera necesario pero incompleto en su planteamiento actual.

“Nos preocupa profundamente la falta de psiquiatras, psicólogos clínicos y enfermeros especializados. No podemos aplicar un plan nacional si no abordamos antes el grave déficit de profesionales en salud mental que tenemos en toda España”, ha declarado Matute.

Un euro por persona y sin plantilla definida

Según explicó la consejera, el Ministerio de Sanidad solo ha previsto una aportación de 80 céntimos por ciudadano para poner en marcha este ambicioso plan, cuya ejecución efectiva recae en las comunidades autónomas. Sin embargo, no se ha abordado la necesidad estructural de ampliar la formación especializada ni se ha incluido a los colegios profesionales en los órganos técnicos del plan, algo que desde Madrid se ha solicitado expresamente.

“Hemos pedido a la comisionada de Salud Mental que incorpore a los colegios profesionales de psicólogos en el comité asesor. No se puede diseñar un plan sin quienes conocen el terreno”, ha señalado.

Caos presupuestario y migratorio, otras preocupaciones autonómicas

Fátima Matute también ha denunciado el impacto negativo que puede tener la falta de presupuestos estatales y la condonación de deuda a determinadas comunidades, advirtiendo que ello podría derivar en un deterioro progresivo de los servicios públicos esenciales, como la sanidad.

“Nos preocupa que el Gobierno, por pactos políticos puntuales, desatienda su obligación de dotar a las comunidades de recursos estables. Llevamos años funcionando con presupuestos prorrogados y cada vez se invierte menos en salud en proporción al PIB”, ha añadido.

En paralelo, la Comunidad de Madrid ha criticado el retraso en la toma de decisiones en el Consejo Interterritorial por falta de preparación técnica en algunos puntos, como el reparto de fondos para la atención a personas refugiadas. Matute ha aprovechado para pedir al Ejecutivo central que afronte de forma clara el “caos migratorio actual, que perjudica a los propios inmigrantes y deja desprotegidas a las comunidades autónomas”.

Un plan de recursos humanos, la gran prioridad

Para Matute, la gran demanda sigue siendo la creación de un plan nacional de recursos humanos en sanidad, que permita planificar a medio y largo plazo la plantilla de especialistas sanitarios en todo el país.

“No solo faltan profesionales en salud mental. También hay un déficit grave en medicina familiar y comunitaria. Necesitamos una fotografía clara de la plantilla actual y un plan para ampliarla cuanto antes”, ha subrayado.