Una mirada posible

La casa en mitad del camino

Leer a Vasko Popa (Grebenac, Vojvodina, Serbia 1922 – Belgrado, 1991) en nuestra lengua representa un desafío y al tiempo un descubrimiento poético, ya que en nuestro idioma existen pocas traducciones de Popa, lo cual hace que tengamos una lectura limitada y sin las suficientes versiones en español que permita hacer una lectura comparativa entre las versiones vertidas al castellano. La poesía de Vasko Popa sorprende por su profundidad y humanidad en un mundo donde lo artificial, poco a poco, se convierte en una extensión de nuestro cuerpo y de nuestra conciencia modificando nuestras habilidades creativas y limitando nuestra imaginación a los “caprichos” de un algoritmo. Es por ello que es necesario recuperar a través del lenguaje poético aquello que nos hace humanos: la capacidad de crear y la capacidad de asombro.

La poesía de Vasko Popa es ese refugio para descansar del tedio, para desoír aquellas palabras sin contenido que a diario leemos en la internet y en redes sociales. Dice el poeta Charles Simic sobre Popa: él es el último de los grandes originales, recordemos que hablar de originalidad es arriesgado porque ya todo en literatura parece estar ya escrito. Gabriel Arturo Castro dice que no podemos hablar de “originalidad”, sino de “autenticidad” y Popa obedece a la línea de un poeta auténtico que desarrollaría su obra en una época donde surgieron grandes referentes literarios: Kafka, Pound, Michaux, Camus y otros autores del siglo XX; es en este tiempo de ebullición literaria, donde Popa modestamente se abre camino con una poesía que mezcla en lo cómico con lo mítico lo absurdo de la guerra.

En el poema Unidad de contrarios Popa, V. (2012). P. 140. Poesía. F.C.E. existe una atmósfera de resignación; un sentimiento tan propio del ser humano. Encontramos en este poema una crítica social hacia el “automatismo” al que es inducida la clase obrera, a través, de los distintos mecanismos de control que ejercen los dueños de los medios de producción para deshumanizar al humano y transformarlo en un engranaje más de la cadena de producción. Vasko Popa, logra en este poema resaltar una de las características que dan cuenta de nuestra humanidad: la capacidad de reflexión y de inconformismo de la clase obrera.  En el poema Declaración de amor Popa, V. (2012). P. 141. Poesía. F.C.E. aparece de nuevo el término: obrero. Esta palabra ha sido la bandera de ideologías políticas para manipular masas. Sin embargo, adquiere una esencia humana en la poesía de Popa porque el poeta recurre al tópico del amor para recordarnos que en la desigualdad y en las adversidades podemos complementarnos con el Otro en un acto de alteridad.

Estamos en una época donde se hace urgente pensar al Otro como un acto de resistencia consciente ante la automatización hacía el ser humano y ante la llegada de la I.A. Vasko Popa en su poética encuentra en la clase obrera los elementos que nos vinculan los unos con los otros: la opresión del sistema capitalista, la guerra y la injusticia. Sin embargo, el pesimismo de Popa revela también una gran esperanza. Su estilo podrá parecer parco en imágenes poéticas, pero Popa logra una exquisita hondura en sus poemas usando las palabras precisas, logra interpretar la realidad social con crítica sin caer en lo panfletario. Es por eso que sentimos sus palabras cercanas, porque no solo toca lo superficial, sino que a través de los huesos rotos asoma su lenguaje poético como ceniza que reconforta en tiempos de constante incertidumbre.